Repercusión de un obituario ficticio. Importancia del posicionamiento

Los alumnos de Periodismo especializado en economía y medio ambiente, asignatura optativa del último curso del Grado de Periodismo, realizaron como de costumbre su tarea semanal: publicar un post en un blog. En la publicación de la semana del 3 de noviembre de 2020 el tema de la práctica era realizar un obituario ficticio sobre Carmen Riu, propietaria y CEO de la Cadena RIU Hotels & Resorts.

Tras la publicación de una alumna, el director de comunicación de RIU, Albert Puig, se puso en contacto con ella. Seguidamente, el encargado de la comunicación de la cadena hotelera concretó una reunión con el profesor de la asignatura. El profesor comentó a los alumnos que llevaba años realizando este tipo de práctica con sus alumnos y que nunca había sucedido algo parecido.

Llegó el momento. Albert Puig se ponía en contacto con la clase y, lejos de criticar las publicaciones de los alumnos, los felicitó por lo que habían conseguido.

Con esto, se pone de manifiesto algo que cada vez cobra más relevancia: la reputación online. Y es que, qué se dice en las redes sociales, como Google captura contenidos y cómo se distribuye es a día de hoy muy importante para tener éxito a nivel digital.

Cuenta Albert Puig que tuvieron noticias sobre lo que se estaba escribiendo sobre su jefa, Carmen Riu, ya que tienen unos motores que miden la reputación de Riu así como crawlers que buscan en el fondo de internet. Pero considera que lo más importante es no solo que se había escrito y publicado, sino que el obituario ficticio de la estudiante con la que contactó había tenido un buen trabajo de distribución, ya que, si no tienes un mínimo de seguidores o no generas un buen posicionamiento, Google no muestra tu trabajo.

Lo que un comunicador ha de tener en cuenta es la parte más difícil, la de controlar, las Deep social, redes informales que cada vez son más formales y donde se distribuyen una gran cantidad de contenidos: Whatsapp, Twitter… El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, se mueve muy bien en esto.

El periodismo tiene que hacer de muro de contención. El único muro es el buen periodismo.